Sus radicales líneas podrían llevar a pensar que se trata de una excéntrica quimera más cercana a la ciencia ficción, pero Eduard Gray ha demostrado ser muy concienzudo a la hora de esbozar sus creaciones, teniendo en cuenta la tecnología existente y las innovaciones en ingeniería naval.
Tan sólo hace falta echar un rápido vistazo a la fisonomía del barco para darse cuenta de que guarda similitudes con las líneas de un superdeportivo. Es un guiño de Gray a sus diseños de vehículos. No en vano, el nórdico ha trazado un prototipo de coche, el Xhibit-G, ex profeso para complementar el Xhibitionist.
Pero es el concepto multifuncional de este superyate lo que está llamando la atención de los expertos. No es un yate de gran eslora de uso exclusivo para su propietario, sino un lugar capaz de albergar diferentes eventos sociales. Como una navaja suiza flotante.
Todavía en el exterior, destaca las enormes y resistentes placas solares, que pueden plegarse y ocultarse en las entrañas de la embarcación. Desplegados, además de suministrar energía a bordo, los paneles sirven bien de helipuerto, con capacidad para tres aparatos, bien como plataforma para albergar conciertos y espectáculos.
El interior del Xhibitionist también puede surfir metamorfosis dependiendo del uso que se vaya a dar al salón principal, la gran zona social de la embarcación. Además de de para dar cabida a los invitados en un espacio moderno y acogedor, la zona puede convertirse en un pequeño centro comercial o en una sala de exposiciones.
A lo largo y ancho de la creación sueca se han dispuesto muchas zonas individuales para garantizar la privacidad. Otra herramienta que tiene el armador del barco para refugiarse de las miradas ajenas son los ventanales provistos de la tecnología Nuance de la compañía Vision System. Basta con deslizar un dedo por la pantalla de una tablet para que los cristales del barco se oscurezcan.
Al igual que el Modernismo o Art Nouveau, con el Xhibitionist se ha creado un concepto nuevo, fresco, que rompe con las normas establecidas. Sólo el tiempo dirá si en el estudio Gray Design fueron unos visionarios.
Texto: El mundo
Al ver la fotografía pensé que era un coche, de lo innovador que es, no sabía que existieran yates en forma de coche.
ResponderEliminarBuena explicación, se nota que es un tema que te gusta y inviertes tu tiempo en buscar información sobre ello.